Es la infografía una herramienta de comunicación esencialmente visual. Esto la sitúa, junto con la fotografía, la ilustración y el diseño, en el primer nivel de lectura de un medio periodístico. Pero es la infografía, además, el primer inductor a la lectura. Esta singularidad se debe a la sencilla lógica de que al ser portadora de información concreta y palabra escrita, demanda del lector un nivel de concentración mayor que sus pares visuales. Así pues: nos introducimos en la lectura de un medio periodístico escrito de la mano de un canal en el que la estética es esencial.